La opción de volver a optar por el camino de la reconciliación se debe al cambio de perspectiva, principalmente, por ambas partes, entre los siguientes factores:
1. Ambas partes aceptaron la imposibilidad de lograr una victoria militar contundente que terminará la confrontación y por tanto, continuar el conflicto no solo resulta costoso, sino que prolongaría la lucha por años haciéndola cada vez más insostenible.
2. En la medida en que se continuara luchando el recrudecimiento del conflicto sería inminente, afectando cada vez más ala población civil, dejando más vulnerables a la sociedad, generando menos crecimiento y más violaciones de derechos humanos, más víctimas etc.
3. El efecto que tuvo el gobierno Uribe en la confrontación con las FARC-EP. Por primera vez, había una percepción de superioridad de fuerzas del Ejército Nacional sobre la insurgencia. La profesionalización de las Fuerzas Militares logró balancear las fuerzas y aumentar la capacidad de respuesta del Estado frente al accionar de la guerrilla. Esa para muchos es la principal razón de que llegarán a la mesa de negociación.
4. La lucha armada como reivindicación de derechos perdió su legitimidad en la opinión de todos los líderes globales