La palabra adicción aparentemente sólo está relacionada con el consumo de sustancias legales e ilegales, como el tabaco, alcohol, marihuana, cocaína, entre otras.
Existen prácticas que pasan inadvertidas aunque se presenten de forma cotidiana, como el uso excesivo del internet a través de celulares, computadoras, tabletas y videojuegos, mismo que sin lugar a dudas puede llegar a convertirse en una adicción.
Es una alteración en el control del uso que le da una persona a esta herramienta, en donde la falta de control se manifestará a través de un conjunto de síntomas cognitivos, conductuales y fisiológicos.
Usará de forma excesiva el internet, lo que le generará una disfunción en sus actividades personales, familiares, académicas o laborales.
En las más recientes actualizaciones de la Clasificación Internacional de las Enfermedades y Trastornos (CIE) relacionados con la salud mental y el DSM – V (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders), instrumentos para diagnosticar enfermedades y trastornos mentales.
No se encuentra la Adicción al Internet, sin embargo, sí se puede encontrar en el CIE, el trastorno por videojuegos ya sea en línea o no.
A pesar de que no se encuentra clasificada como una adicción como tal, ha habido diversas preocupaciones por especialistas como doctores, pediatras, psicólogos y psiquiatras que han realizado investigaciones de esta alarmante problemática.
La Dra. Kimberly Young (1996) propone ocho criterios para conocer si se tiene una adicción a internet (son necesarios por lo menos cinco), para considerar un uso patológico de este, el cual puedes realizar desde este link
Luengo López (2004), cita a Mark D. Griffiths (1998) psicólogo inglés, especialista en adicciones a videojuegos, quien dice que cualquier comportamiento que cumpla con estos seis criterios será definido como adicción
1. Cambio en el comportamiento: inquietud, impaciencia e irritabilidad, especialmente cuando no se puede tener acceso al medio adictivo.
2. Aislamiento y confinación. Pérdida de comunicación y deterioro en las relaciones más cercanas.
3. Alteración del curso normal de la vida para usar las TIC (no ir a la escuela, trabajo, descuido de obligaciones cotidianas, dejar las responsabilidades para más tarde)
4. Justificación constante cuando exceden el tiempo del uso del internet.
5. Abandono de actividades que solían hacer.
6. Incapacidad de controlar voluntariamente el uso.
7. Mentiras o engaños para realizar a escondidas las actividades adictivas.
8. Cambio de hábitos de sueño o alimentación.
Goldberg (1995), citado en el artículo de Arancha Luengo López (2004), menciona otros síntomas importantes a considerar:
En la Universidad de Guadalajara, CU Lagos, en el 2019, se llevó a cabo un estudio publicado en la revista Enseñanza e Investigación en Psicología llamado: Adicción a internet: el caso de adolescentes de cinco escuelas secundarias de México, donde se obtuvieron los siguientes resultados más relevantes
de los jóvenes mencioanron que tenían problemas para controlar su tiempo de navegación en redes sociales.
ha notado que cuando no se encuentran conectados a internet, tienen pensamientos recurrentes sobre lo que pueden estarse perdiendo al no permanecer conectados o lo que puede estar pasando en la red y ellos no se han enterado.
considera que ha descuidado su vida social por permanecer en internet.
Los adolescentes, principales usuarios de las redes sociales:
Para poder prevenir este tipo de problemática en los menores de edad, es importante que los padres de familia implementen hábitos de uso diario, con reglas y límites que ayudarán a sus hijos a tener un mejor autocontrol.