El Manejo Integrado de Plagas (MIP) implica una cuidadosa consideración de todas las técnicas disponibles de control de plagas y una integración posterior de medidas adecuadas para evitar la proliferación de plagas. Se requiere mantener la utilización de productos fitosanitarios y otros tipos de intervención en niveles justificables económicamente y reducir o minimizar los riesgos para la salud humana y para el medio ambiente.

CC 4.2.1.01 y 4.2.1.02. La empresa ha recibido la orientación de un experto en estrategias de manejo integrado de plagas (MIP).

CC 4.2.1.03. Se ha implementado al menos un control alternativo al uso de plaguicidas.

Es un método natural que resulta de la acción de organismos vivos que tienen la capacidad de reducir las poblaciones de una plaga. Estos organismos que realizan el control biológico los conocemos como “aliados” y no se comportan como plaga de nuestros cultivos. Pueden ser los depredadores naturales de las plagas y perfectas herramientas para deshacerse de ellas.

El uso de control manual de malezas es una técnica de control alternativo al químico.

El Umbral de Daño Económico (UE) es la cantidad de plaga presente donde el costo de intervención es menor al costo generado por el daño de la plaga. Es el momento donde se justifica realizar una intervención. Esto puede variar en cada plaga o adversidad. Los registros de monitoreo y de aplicaciones permiten demostrar que se cumple con este requisito.

Cuando hay presencia de enfermedades generadas por hongos se puede utilizar el monitoreo de las condiciones de clima con datos como temperatura y humedad, que suelen ser los que generan las condiciones predisponentes para el desarrollo de la enfermedad.

El seguimiento del cultivo y el registro del monitoreo   son prácticas fundamentales en el manejo de plagas. El monitoreo pueden incluir la presencia de enemigos naturales donde adicionalmente brindan información sobre la necesidad de intervención.

Existen sistemas oficiales de control donde los organismos sanitarios oficiales de cada país realizan el monitoreo de ciertas plagas.

CC 4.2.1.0.5 La empresa monitorea las principales plagas y enfermedades de los cultivos Fairtrade.

La agricultura orgánica es un sistema de producción que trata de utilizar al máximo los recursos de la finca, dándole énfasis a la fertilidad del suelo y a la actividad biológica. Al mismo tiempo, se intenta minimizar el uso de los recursos no renovables, fertilizantes y plaguicidas sintéticos para proteger el medio ambiente y la salud humana (FAO).

La producción orgánica permite demostrar que se realiza un manejo integrado de plagas.

CC 4.2.1.04. Se ha implementado al menos una medida preventiva alternativa al uso de plaguicidas.

A continuación situamos ejemplos de medidas que pueden ser parte de un manejo integrado de plagas en banano.

 Control Mecánico:
El sistema radical del banano es superficial, la mayoría de las raíces están a 15 cm de la superficie del suelo. Todas las labores de cultivo, excepto las más superficiales, tienden a dañar el sistema radical, por lo que generalmente se deben evitar (Simmonds 1959). Las labores de cultivo son también una de las causas más importantes de la erosión del suelo. Por tanto, se requieren otras opciones al efecto. Una práctica típica es segar las malezas 3-4 veces al año, las que se dejan cubriendo el suelo, lo que ayuda a

evitar la erosión, el brote de nuevas malezas y permite el acceso al campo (Feakin 1971).

Gestión de la fertilidad del suelo:

El PIP (Proyecto Incremento a la Productividad) es un exitoso ejemplo de control biológico en banano. Este método se basa en mejorar la salud del suelo a través de microrganismos y lo que se persigue básicamente es difundir y transferir tecnologías en la optimización del manejo agronómico de los sistemas de producción de banano. Los objetivos del PIP son aumentar la producción bajo el esquema de agricultura orgánica, incrementar del vigor y retorno de las plantas, recuperar la salud del suelo y disminuir el uso de agroquímicos.

A continuación mocionamos algunos ejemplos de prácticas que pueden ser parte del manejo integrado de plaga en uvas.

 Control Mecánico:
El uso de control manual o por máquinas de malezas en una técnica de control alternativo al químico. En producción orgánica de uvas de vino se utilizan también el pastoreo de ovejas. 

Control de riegos:
La gestión del riego es una práctica reconocida para el control de enfermedades de la uva como Botrytis.