Se dice que San Valentín se enfrentó al emperador Claudio III en Roma quien estaba en contra de los matrimonios.
En secreto San Valentín se reunía con los enamorados para que se casaran.
Claudio lo encarceló y San Valentín hizo un milagro. Julia, la hija ciega de su carcelero se acercó a él y recuperó su vista. Padre e hija se convirtieron al catolicismo.
Sin embargo, el Emperador mandó matar a San Valentín. Él se volvió un mártir y Julia plantó un árbol de almendras como símbolo de amor y amistad.